“El ordenamiento territorial y el urbanismo en apoyo a la implementación de la Nueva Agenda Urbana y el desarrollo sostenible”.

La Nueva Agenda Urbana es una guía para orientar los esfuerzos en materia de desarrollo del territorio y las ciudades para los próximos 20 años. Acordada por más de 190 países, procura crear un vínculo de refuerzo recíproco entre urbanización y desarrollo socioeconómico, como vehículo paralelo para alcanzar un modelo de desarrollo sustentable. Ahora bien, la agenda no es vinculante; su implementación efectiva depende de los países que la han suscrito y sus ciudades.

La implementación depende en gran medida de la Planificación Física, la herramienta del ordenamiento territorial y el urbanismo, para garantizar el uso racional de recursos disponibles, la gestión y el control del territorio y el uso del suelo. Estas son herramientas esenciales para enfrentar los retos que impone el desarrollo sostenible en nuestros países cuando están presentes diferentes modelos económicos y estilos de desarrollo, ocurren eventos naturales y antrópicos severos, con impactos diversos sobre ecosistemas, poblaciones, biodiversidad, producción de alimentos; cuando se desencadenan intensas sequías o inundaciones por lluvias, asciende la temperatura del planeta y se eleva el nivel medio del mar, se reducen los glaciares, entre otros; en lo social se acrecientan las desigualdades, la pobreza, los distintos modos de vida, oportunidades y restricciones que ocasionan diferencias a tomar en cuenta en los procesos de asimilación, integración y uso de los territorios rurales y urbanos.